Augusto de Prima Porta.

-Titulo: Augusto de Prima Porta.

-Estilo: se trata de una escultura perteneciente a la época imperial.

-Cronología: es el modelo de escultura típico del siglo I d.C.

-Contexto: en la época imperial se da una fuerte helenización que discurre desde la segunda mitad del siglo V a.C. hasta el siglo IV a.C. y en la que se da el abandono del realismo y se adopta el idealismo y se llega a la representación divinizada de los emperadores, en la que cabe destacar al emperador Augusto.

-Autor: esta escultura es un duplicado de un retrato de Augusto que originalmente era de bronce y oro, encargado por Livia, su esposa, en el año 20 d.C.

-Clasificación: es una escultura de bulto redondo que representa una imagen idealizada del emperador César Augusto. Por la forma en la que aparece vestido podemos decir que se trata de un toracato y por su disposición del cuerpo es un cumimperio ya que se encuentra arengando a las masas, gesto que se nos indica con el levantamiento del brazo derecho. Lo que la escultura trata de transmitir por lo tanto es heroicidad por parte de Augusto.

-Material: se trata de una escultura tallada en mármol que originalmente estaba policromada.

-Características formales: es una escultura idealizada ya que no recoge rasgos faciales distintivos en los que Augusto pueda expresar un estado de ánimo.

Respecto a su anatomía, la escultura se encuentra proporcionada y vestida por una coraza guerrera militar en la que aparecen dioses como Minerva, Apolo, Telle y Eros, y sus conquistas más importantes como la de Hispania y Galia entre otras. La escultura también consta de una serie de paños de forma drapeada que Augusto sostiene con su brazo izquierdo.

En su composición cabe destacar que la escultura se encuentra dispuesta en contrapposto, con el brazo derecho elevado para llamar la atención de las masas y mostrarles la coronal de laurel que sostenía, mientras que con el brazo izquierdo sostiene un bastón de mando consular. Esta escultura crea diagonales entre los miembros tensos y relajados.

Ya que se trata de una escultura idealizada, no podemos observar ninguna expresión en ella salvo un rostro tranquilo y distante, pero a la vez nos transmite la idea de emperador victorioso, decidido y capaz de todo como podemos observar con el levantamiento de su brazo derecho.

Muestra una iconografía en la que se nos representa a Augusto como una divinidad ya que se encuentra descalzo, al igual que los antiguos dioses olímpicos y un Cupido abraza su pierna derecha, lo que simboliza su condición de descendente de diosa Venus a través de Eneas. Al mostrarse así, la escultura consta de una función básicamente propagandística en la que se trataba de mostrar al pueblo romano la grandeza y el poder de su emperador Augusto.

-Conclusión: el contrapposto de esta escultura ha sido tomado de una influencia anterior perteneciente al arte griego, ‘El Doríforo’ de Policleto y, por sus paños, podemos identificarla también con la escultura perteneciente al arte etrusco, ‘El orador’ ya que ambas aparecen con los paños drapeados y el brazo extendido.

El Orador (s. V a.C.)

El Doríforo (450-445 a.C.)